Es un lugar extraordinariamente bello, situado en la comunidad de Santa María a escasos minutos de la cabecera municipal, vale la pena recorrer un camino de terracería para finalmente apreciar la hermosa cascada.
El sitio arqueológico de Piedra Labrada, que coexistió con los zapotecas de Oaxaca y los teotihuacanos, entre otros grupos del Centro de México, pertenece al Municipio de Ometepec, del cual dista unos 8 kilómetros. Sin carretera que lo comunique ni transporte colectivo regular, un camión de redilas hace un viaje miércoles y domingos.
Desde 1960, el arqueólogo Román Piña Chan documentó su existencia tras emprender un recorrido por los caminos que transitaban los pobladores a lomo de mulas o caballos.
Los propios habitantes han encontrado ya unas 400 piezas, entre las que destaca la efigie (escultura) de un jugador de pelota decapitado, misma que es exhibida a las afueras de las oficinas del comisario ejidal.
Están en terrenos de zacualpan, a 16 kilómetros de Ometepec. Sus aguas son termales, muy calientes en los yacimientos de los manantiales. Las aguas son abundantes y forman un arroyo cuyas pozas, van dejando de ser calientes a medida que el arroyo se aleja del yacimiento de los manantiales.
Atotonilco en voz mexicana y significa: “Donde hay aguas termales”. Atotonilco es un lugar muy tranquilo y es magnífico para pasar un día familiar, puede tomar un baño de agua caliente o de agua fría como se puede apreciar en esta foto, sitio inigualable para relajarte, los que ya han tenido la experiencia de bañarse en estas aguas opinan que son curativas y se sienten renovados para continuar con sus actividades cotidianas.
Es un lugar de maravillas para la explotación medicinal. Tiene muy cerca al rió de santa Catarina, cuestión de cinco minutos. Seria provechoso unir los dos paseos: el rió y el manantial.
La parroquia de Santiago Apóstol, una de las construcciones católicas más grandes de todo el estado de Guerrero. A dicho santo se le celebra los días 24 y 25 de julio con fiestas y danzas populares de la región, entre ellas la conocida “chilena”.